La educación Plenitud

El concepto que tiene Plenitud en materia de educación, está basado en un monismo filosófico.  Procuramos, por medio de los contenidos y la reflexión, encontrar la esencia  subyacente en el hombre por encima de las efímeras diferencias materiales. Buscamos unir al individuo consigo mismo y con la sociedad y a ésta con lo planetario. Porque estamos convencidos que lo que le ocurre al individuo repercute en la sociedad, empezando por la familia, que es la  sociedad primaria, y se proyecta hacia todos los hombres del planeta.

Diría HPB: "hasta la caída de una hoja conmueve al universo".

La educación Plenitud tiene como prioridad la formación de un ser humano unificado, inteligente, de personalidad controlada y auto-conciente.

Hacia un Ser Humano Unificado

Para explicar este concepto hay que partir de la hipótesis, que existen dos naturalezas que están en constante batallar dentro del ser humano: un Yo Superior y un yo inferior.  El primero eterno y el segundo transitorio como la misma naturaleza biológica. El Yo Superior es para nuestra filosofía (la teosofía) el Alma mientras que el yo inferior es la personalidad, que incluye lo físico, las emociones y la mente concreta o razón. Estos dos"mundos" en constante puja, en permanente conflicto son  la "voz de la conciencia" y la "voz de los sentimiento y la razón". Estas dos voces se disputan la atención del hombre como totalidad. Cuando la voz del alma tiene mayor fuerza, nace el hombre al plano de la espiritualidad; pero si triunfa la voz de la personalidad, el hombre se sume en la materialidad, en lo transitorio, en la ilusión de una vida de fantasías donde no se reconoce la eternidad.

Con lo pies en la tierra y los ojos mirando el cielo

En el Programa Plenitud  para la educaciónhemos elegido una tercera alternativa: el  sendero del medio, que es la armonía por oposición:  lograr el equilibrio entre el mundo interior y el exterior. Hemos acuñado una frase que nos representa: "con los pies en la tierra y los ojos mirando el cielo".

Buscamos unificar espíritu, mente, psiquis y físico. Intentamos alinear mente y corazón, para lo cual hay que construir un puente mediante la meditación, la comprensión, la reflexión  y el trabajo creador.

Nuestra tarea en materia educativa está orientada a lograr la integración del alma con la personalidad, en un intento de reconciliación de los opuestos para que surja el ser humano total, unificado.

El punto de reunión de nuestra tarea pedagógica es la disciplina de la mente que, en definitiva, es la causante del conflicto que atormenta al hombre y a la vez guía que nos abre las puertas del cielo.

Solo una mente disciplinada por la voluntad ( que es la energía del alma), dirigida por el esfuerzo constante, es capaz de discernir y establecer la diferencia entre el bien y el mal. Una mente controlada tiene la capacidad de diferenciar "las voces" y acertar en la elección.

Nuestro propósito colaborar en la formación de mujeres y hombres buenos. Sin embargo buscamos, no la bondad del inerte (que no hace nada por el resto de los hermanos), sino del solidario, de aquel que  es sensible al éxito o fracaso del otro, aquel que tiene por máxima el servicio al prójimo y la buena voluntad para con todos los seres.

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